Nota que se realizo en el Suplemento Economico del Diario La Mañana

¿En qué trabajan los neuquinos?

Según un estudio del municipio, sólo el 5% de los capitalinos trabaja de forma directa en el sector hidrocarburífero. Un 20% lo hace en empresas de servicios. El 37% depende de alguno de los niveles del Estado, una cifra que dobla la media nacional. Los jóvenes sin secundario son los que más sufren la exclusión del mercado.

El mapa laboral de la ciudad de Neuquén tiene su epicentro en los pozos petroleros. No se trata de un capricho geográfico (de hecho, no son muchas las explotaciones dentro del ejido), sino más bien de un acontecimiento económico: la producción de hidrocarburos derrama sobre el resto de los sectores y explica buena parte de los puestos de empleo que se registran en la capital.
Sin embargo, según un estudio realizado por la Dirección Municipal de Desarrollo Local, Estadística y Censo de la Municipalidad, sólo el 5% de la población neuquina trabaja directamente en el sector hidrocarburífero, algo comprensible atento a las distancias entre la ciudad y las zonas de explotación. De todas formas, casi un 20% del empleo se concentra en las empresas de servicios, muchas de las cuales trabajan para el sector.
A su vez, el 37% de los capitalinos –entre empleados y contratados- trabaja para alguna dependencia estatal, ya sea comunal, provincial o nacional. Se trata, según el estudio de un porcentaje que duplica la media nacional, que está en el orden del 18%.
En cuanto al mercado total, un 34% se desempeña en el sector público, un 41% en el sector privado, un 18% son cuentapropistas, mientras que el restante 7% se divide entre patrones y trabajadores familiares.

Sectores dinámicos

En los últimos 20 años la ciudad se perfiló hacia los servicios y el comercio, convirtiéndose en el centro urbano de mayor actividad económica en la Patagonia. Tomando esta premisa, el estudio realiza un análisis desglosado de los sectores terciarios más importantes y dinamizadores.
El comercio y los hipermercados dan trabajo al 17% de los capitalinos. “La mayor cantidad son jóvenes entre 18 y 25 años, con secundario completo. El sector representa el 19% de la actividad económica de la ciudad”, señala el trabajo.
El rubro se mostró muy dinámico a partir de 2003, de la mano del boom del consumo post-devaluación. Los puestos más demandados son los de cajeros, carniceros, panaderos, pasteleros y atención al público.
El sector hotelero y gastronómico también demanda buena parte de los trabajadores jóvenes de la provincia, al igual que las empresas de servicios, que ocupan un 20% del mercado laboral. El 15% de los capitalinos se desempeña en alguna actividad relacionada con la construcción que, sin embargo, perdió peso en los últimos años con la desaparición de decenas de empresas.

Primer trabajo

Uno de los puntos más salientes del diagnóstico del municipio es el estudio del ingreso al mercado laboral. De las observaciones se concluye que el 50% de los desocupados no tiene el secundario completo, requisito indispensable en aquellos sectores que más mano de obra joven demandan.
También hay referencias cualitativas que se desprenden de la palabra de los propios empresarios. Según ellos, los jóvenes no sólo no tienen la formación deseada sino que no cumplen con los requisitos de responsabilidad necesarios para desempeñar una tarea.
En una de las poblaciones más jóvenes del país, el diagnóstico educativo enciende una luz de alarma: el estudio de la Municipalidad asegura que “existe una demanda firme en capacitación de oficios” y que “las instituciones educativas de la ciudad no alcanzan a cubrir la demanda”.

“Hay un gran déficit en educación”

El director municipal de Desarrollo Local, Estadísticas y Censos, Claudio Vásquez, aseguró que existe “un gran déficit en educación” en la ciudad. “Hay mucha deserción en la escuela media neuquina y las empresas se encuentran con esa dificultad a la hora de contratar personal”, explicó el funcionario, autor del diagnóstico de empleo.
Para Vásquez, esta situación no sólo los limita en cuanto a la formación, sino también en la forma en que se desenvuelven en el trabajo y en “la relación con sus autoridades y sus compañeros”.
A su vez, Vásquez aseguró que Neuquén es la ciudad de servicios de todo el Alto Valle, no sólo por su actividad comercial sino por el desarrollo de servicios que proveen, por ejemplo, al sector petrolero.
El funcionario señaló que desde el municipio se trabaja en capacitaciones para mejorar la inserción laboral a través de la enseñanza de oficios. “Hay sectores vulnerables que no pueden acceder a la formación técnica privada”, señaló y aseguró que la comuna busca cubrir ese déficit.

Un 40% más de unidades económicas

En 2009, último año relevado, la capital neuquina tenía más de 12 mil unidades económicas registradas, según la Dirección Provincial de Estadísticas y Censos. La gran mayoría de ellas, más del 40%, dedicadas al comercio al por menor. En cinco años, la cantidad de empresas que obtuvieron su registro para funcionar subieron, también, más de un 40%.
Uno de los rubros que más creció desde 2005 es la industria, desafiando el perfil terciario de la economía neuquina. El año pasado, se registraron 637 fábricas vinculadas a la actividad manufacturera.
Sin embargo, también subieron de forma acentuada las actividades netamente vinculadas a los servicios como la intermediación financiera o los servicios inmobiliarios.

Menos desempleo

Al tercer trimestre de 2010, última fecha relevada, la desocupación en el conglomerado Neuquén-Plottier rondó el 3,9 por ciento, una de las cifras más bajas del país, según el INDEC. La tasa cayó 2,8 puntos con respecto al mismo período de 2010.
A su vez, la tasa de subocupación alcanzó en este período el 6,5%. Se trata de todos aquellos neuquino que trabajan menos de 35 horas semanales y están dispuestos a aumentar esta carga horaria.


Por Roberto Aguirre
aguirrer@lmneuquen.com.ar